lunes, 18 de mayo de 2015

LA HISTORIA DE TERRY FOX


Terry Fox era un chico normal. Nació en Winnipeg ( Canadá) en 1958.
Desde niño sus padres Rolly y Betty le motivaron en la práctica del deporte. Siempre fue un buen deportista pero, en 1977, los dolores en su pierna derecha, le obligaron a dejarlo. Se le diagnosticó osteosarcoma, una agresivo cáncer de huesos. Su pierna derecha fue amputada por encima de la rodilla. Y se tuvo que someter a un intenso programa de quimioterapia.
Terry Fox
Los primeros estudios tras el tratamiento le dieron a Terry un 15% de posibilidades de vida. Pero al poco tiempo, gracias al desarrollo de la medicina, su esperanza de vida había crecido un 50%. Esa fue la inyección que Terry necesitaba para comenzar con su cruzada. En agosto de 1979 se inscribió en la maratón Prince George. Aunque contaba con una pierna ortopédica que no estaba preparada para correr, y hacerlo le causaba un intenso dolor, completó el recorrido y encendió su pasión.
Inspirado por Dick Traum, ( el primer amputado que completó la maratón de Nueva York), Terry comenzó el 12 de abril de 1981 una acción solidaria que conmovió al país entero. El objetivo era recaudar un millón de dólares para el estudio de la enfermedad. El nombre fue: “Maratón de la Esperanza”.
Terry Fox
“Necesitamos su ayuda. Las personas con cáncer en los hospitales de todo el mundo necesitan creer en milagros. No creo en milagros. Se que mi acción no dará respuestas definitivas para encontrar la cura del cáncer pero soy un soñador. Tengo que hacerlo”. Estas palabras fueron escritas por Terry en una carta que envió a la Sociedad Canadiense por la lucha contra el cáncer, después de que su pierna fuera amputada.
Dicho y hecho, Terry comenzó a correr con la esperanza de poder atravesar Canadá y el Océano Atlántico con el Pacifico. Hoy, en el lugar de partida, hay un monumento que lo recuerda.
Terry Fox
A medida que pasaban los días y los kilómetros, su historia se fue difundiendo y cada vez eran más las personas que lo acompañaron corriendo. Darrel, su hermano, estaba con él siguiéndole en una camioneta.
Terry Fox
Con una media de 42 kilómetros darios, Terry comenzó a atravesar Canadá. Pero el 1 de septiembre de 1980, cuando Terry llegaba a Thunder Bay, tuvo que abandonar la carrera después de recorrer 5373 kilómetros durante 143 días. Un fuerte dolor en el pecho no le permitía respirar con normalidad. De inmediato fue trasladado a un hospital pero nada se podía hacer, su cáncer se había propagado por sus pulmones.
“Voy a dar lo mejor. Prometo que no me voy a rendir”, dijo Terry cuando era trasladado en ambulancia al hospital. Por entonces ya se habian reacudado más de 24 millones de dólares para la lucha contra en cáncer.
Mensajes de esperanza comenzaron a llegar desde todos los rincones del planeta. Incluso el Papa, Juan Pablo II, envió un telegrama mostrando su apoyo. El 28 de junio de 1981 Terry falleció.
Pero con su muerte su legado apenas comenzaba. El 13 de septiembre de 1981 se realizó la primera edición de la Maratón Terry Fox. A ella se presentaron más de 300.000 canadienses y se recaudaron casi cuantro millones de dólares. En la actualidad la prueba se sigue realizando cada año, y en ella no existen vencedores, solo una acción caritativa.
Judith Fox, la hermana de Terry, preside actualmente la fundación que se lleva su nombre y en todo el mundo se realizan unas 4.000 competiciones cada año en su nombre.
En Canadá, es una de las personas más recordadas. Existen distintos monumentos en diferentes lugares por los que pasó corriendo. Al cumplirse los 25 años de su proeza Canadá emitió una moneda conmemorativa de un dólar con su rostro y Adidas lanzó una zapatilla con su nombre. Todo lo recaudado en ventas fue destinado a la fundación.
Terry Fox
El cine tampoco se perdió su historia, y también hay una película que lo recuerda. Desde el mundo del deporte, después de 30 años de su hazaña, la memoria y los logros de Terry Fox aún continúan vivos.