lunes, 4 de mayo de 2015

¿MASTICAR CHICLE AUMENTA TU CONCENTRACIÓN?



Las escuelas que prohíben el consumo de chicle en clase deberían ver esta investigación de la Universidad de Cardiff. De acuerdo con las tomografías, el acto de la goma de mascar activa el hipocampo; el área del cerebro responsable de la memoria. Los científicos también asocian el hábito con mayor atención y reducción el estrés.

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¿LA GOMA DE MASCAR AYUDA A ADELGAZAR?, ¿AYUDA REALMENTE A TENER UNA MEJOR FIGURA?:
Dos estudios recientes demuestran que la goma de mascar sin azúcar aumenta la sensación de saciedad; sin embargo sus resultados son vistos con escepticismo por la comunidad científica, ya que las encuestas fueron llevadas a cabo por el Wrigley Science Institute (que, por cierto, pertenece a un fabricante goma de mascar). En 2013, un artículo publicado en la prestigiosa revista Fisiología y Comportamiento, se mostró que la goma de mascar no tiene ningún efecto significativo sobre el apetito humano.

Otro estudio publicado en Eating Bheaviors, relaciona la conducta del ábito de la goma de mascar con el hecho de comer más, pero comer menos veces durante el día. Sin embargo, esto no significa una reducción en calorías. De hecho, las gomas con sabor a menta hacen que el sabor de las frutas y verduras sea un poco desagradable, aumentando entonces la preferencia por la comida chatarra.

¿LA GOMA DE MASCAR PRODUCE GASES?:
Según el Servicio Nacional de Salud del Reino Unido, cualquier actividad en la que se trague aire más de lo normal, podría aumentar la aparición de gases. Sin embargo, según la organización, lo más común que se vería en estos casos sería un eructo.

¿LA GOMA DE MASCAR INFLUYE EN EL ALIENTO?:
Es obvio que cuando se comienza a masticar un chile, el aliento va a mejorar. Pero ¿qué pasa cuando escupes la goma? El movimiento de mascar estimula la producción de saliva, lo que impide que tu boca esté seca. Y la boca seca puede causar mal aliento. Sin embargo, la producción de saliva acelerada es incapaz de disimular el aliento causado por problemas estomacales o la falta de un buen cepillado de dientes.

¿QUÉ PASA SI ME TRAGO UN CHICLE?:
 “Va a estar 7 años recorriendo tu estómago  intestino”, dicen las madres más prudentes. La verdad es que sí, que muchos de los ingredientes de la goma de mascar no pueden ser digeridos por los seres humanos. Pero el flujo de saliva hace que la goma que se ingiere no se pegue (al menos en la mayoría de los casos) en las paredes de su sistema digestivo y pueda ser enviado a su "destino final" (sabes muy bien a lo que nos queremos referir con esto). Pero la preocupación de los padres con niños pequeños y la goma de mascar no es infundada: porque de hecho pueden causar bloqueos cuando el sistema digestivo está estreñido, o cuando se ingieren grandes cantidades de chicle.

ES DAÑINA PARA LA DENTADURA:
Si tu goma de mascar contiene azúcar, básicamente estás "bañando" los dientes en azúcar mientras masticas lentamente. Esto puede contribuir a la caries dental. Incluso si no estás masticando chicles con azúcar, aún así hay riesgos para los dientes porque el chicle sin azúcar a menudo contiene aromas ácidos y conservantes que pueden de hecho conducir a la erosión dental. EL proceso de erosión dental puede legar a ser mucho peor que la caries, ya que consiste en la descalcificación de los dientes, lo que literalmente significa que con el paso del tiempo tus dientes se disuelven.

LA GOMA DE MASCAR ESTÁ LIGADA A LOS DOLORES DE CABEZA EN ADOLESCENTES:
Los adolescentes son conocidos porque les encanta masticar chicle y hacer pequeños globos. Si tu hijo es un masticador de chicle frecuente y sufre de dolores de cabeza, debes saber que recientemente se estableció un vínculo entre estas dos cosas. Un estudio involucró a 30 masticadores de chicle entre las edades de 6 y 19 años. Todos ellos sufrían de migrañas y dolores de cabeza diariamente. Después de haber dejado la goma de mascar durante un mes, a 19 de ellos se les había desaparecido los dolores de cabeza por completo, mientras que otros siete presentaron una reducción en la frecuencia de dolor de cabeza. Veintiséis de los niños a continuación comenzaron a masticar chicle nuevamente, sólo para que sus dolores de cabeza regresaran en pocos días.

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